jueves, 30 de junio de 2011

Sobre multinacionales y gobiernos

Como ya he dicho alguna vez yo trabajo en una multinacional como mando intermedio. La planta industrial en la que trabajo se enfrenta a unas posibles perdidas de nueve millones de Euros el año que viene.
Con este panorama, todo el mundo puede pensar que es necesario grandes reformas para viabilizar la planta, es de suponer tambien que el esfuerzo de los directivos se centre en reducir costes y aumentar beneficios de cualquier forma posible, sería de esperar tambien que los sindicatos intenten remar en la misma dirección y aportar ideas para reducir costes.
Sin embargo la situación es la siguiente:
La directiva toma decisiones incoherentes con la politica seguida por ellos mismo hasta el momento, decisiones insuficientes ya que no permiten reducir el sobrecoste futuro y simplemente son parches que aumentan la agonia, decisiones faciles que aunque son impopulares se han tomado sin un analisis exhaustivo de los costes y de las oportunidades de ahorro.
Los sindicatos se enrocan en defender un inmovilismo ya imposible, posiciones utopicas o ahorros miserables que no consiguen ni conseguiran contentar a la directiva, ni levantar los beneficios de la compañía. Sugieren ahorros que ellos mismos saben son insuficientes o que no se han valorado correctamente, seguramente por desconocimiento del funcionamiento de la compañía o falta de informacion.
Mientras tanto un pequeño grupo de mandos intermedios, tecnicos y trabajadores olvidados vemos la vida pasar, nadie nos consulta ni nos pide opinión. Tenemos ideas de ahorros tan importantes como los de la directiva y los sindicatos juntos. Ideas bien valoradas, facilmente implantables, ideas sensatas y que podrían conseguir el efecto buscado, un ahorro importante, minimazando daños al trabajo y el funcionamiento de la compañía. Sin embargo nadie nos escucha, nuestras ideas ni siquiera pueden ser expuestas en el foro adecuado.
La directiva desprecia cualquier idea que no sea suya con la arrogancia del que se cree con la razon y con la fuerza que le da el poder. Los sindicatos tampoco escuchan a mandos por muy intermedios que sean, saben que no pertenecen a su colectivo y no pueden escuchar voces fuera de su clase porque implican cambios que no son bien vistos entre los que se encuentran comodos en su situación actual.
A día de hoy no se como va a terminar el tema, pero si se que la solución si es que la hay no va a ser la mejor. 
¿Por que?
Porque el gobierno de la compañia es incompetente, falto de conocimientos e incapaz de profundizar en los problemas y las soluciones, mientras que la masa social o el pueblo de la empresa sufre de parecidos males, es incompetente por falta de información, incapaz por falta de conocimientos y tiene dificultad para tomar decisiones impopulares porque su fuerza radica en el populismo.
¿Les suena de algo?, yo imagino el funcionamiento de un pais de un modo similar, un gobierno y un pueblo similar. Pero también en este pais imagino que existe un grupo de tecnicos, expertos, gente que no pertenece a ninguno de los dos colectivos pero que posee conocimientos y capacidad de analisis, que tienen ideas claras, sensatas y suficientes pero que no son escuchados.
¿seremos capaz de encontrar esas pequeñas voces en la multitud y hacerlos salir a la luz, incorporandolos al sistema y utilizarlos para sacarnos del problema?

jueves, 16 de junio de 2011

Sobre aceites y televisores

Hoy me encontre a un amigo en el hipercor, yo había ido alli porque alguien me había dicho que alli podria encontrar una lata de aceite jienense de exquisita calidad, que suelo comprar por telefono y que me proporciona uno de mis pequeños placeres mundanos, unas tostadas de pan con aceite supremo al desayuno.
Mi amigo había ido alli porque quería comprar un televisor ultima generación.
Al final no compramos ninguno de los dos y de camino a mi casa mi mente le daba vueltas a pequeñas reflexiones:
- El mismo aceite lo puedo comprar por telefono a un precio muy inferior llamando directamente a la coperativa que lo produce. Unico problema que tengo que comprar 6 latas de 3l, pero esta claro que no voy a pagar al corte ingles el doble de lo que ya es un precio justo. Ya me buscare la vida para colocar latas de 3l entre familiares y amigos.
- Cuando compre mi actual televisor de tubo hace 7 años pague por el alrededor de 250€, es marca Daewoo (made in Korea) y me permite ver pelis con bastante calidad, realmente nunca me ha interesado la calidad de imagen, sino la calidad del producto que visiono.
- En 7 años la televisiones han dejado atras varias tenologías, tubo, plasma, lcd y ahora led, y un televisor de un tamaño similar al que tengo de última generación Samsung (made in Korea) cuesta del orden de 5 veces más.
- Un 100 % de incremento en el precio del aceite para los intermediarios de venta me parece un poco elevado, sobre todo porque cualquiera tiene acceso al productor.
- Los Koreanos ganan 5 veces mas ahora que hace 7 años, porque el valor productivo de la tele no se ha incrementado. Ese tipo de crecimiento desproporcional me suena de algo.
- El Corte Ingles da valor a un producto acercandolo al consumidor y vendiendo bajo su marca.
- Los koreanos tienen tecnología y eso es lo que da valor a sus televisiones, aunque esa tenología simplemente sirva para alimentar el snobismo de la sociedad.
- Vivimos en un mundo extraño en el que es mas  facil ganar dinero siendo un gran intermediario que produciendo.
- Vivimos en un mundo extraño en el que la necesidad relativa de una mejor calidad de imagen nos genera una demanda superflua que hace que la tecnologia y el precio de un producto se incremente.

¿Quien tiene realmente la culpa de que vivamos en este mundo extraño?

Ellos que nos manipulan para que consumamos según sus patrones establecidos o nosotros que nos dejamos manipular y queremos que nuestra tele sea de última generación aunque sea para ver programas vacios.
Ellos que nos bombardean con la idea de que el sitio donde se puede encontrar todo, es el centro comercial o nosotros que nos lo creemos y no nos interesamos por encontrar otras formas de compra y venta.